Si
cada experiencia nos dejara elegir, si cada dolor se sentara a nuestro lado a
esperar la comprensión, si cada instante se convirtiera en sueño, seríamos
simples hojas al viento.
Pero
lejos de eso somos espíritus dotados de fuerzas que no conocemos, para librar
nuestras batallas, las que nosotros creamos y las que nos regalan.
Deja
que se queme la cabaña de tus sueños mira bien, hay un nuevo paisaje asomado a
tu ventana, hay nuevos soles que darán rayos cálidos a tus sueños, habrá flores
y frondosas campiñas, habrá frutos de sabores nuevos, entonces comprenderás que
nada se ha marchado solo renovado o transmutado recuerda, la semántica es solo
un medio, es mejor llegar al corazón de las letras y encontrar en ellas lo
escondido y velado.
El bosque sagrado esta cantando siempre odas de esperanzas y de amor y de claves para ser victoriosos, en esas guerras externas e internas.
Hay en el bosque miles de girasoles y me pregunto que suerte de colores, de perfección, la creación nos dio tal regalo, los miro y me asombro de veras que hermoso cuando a las 6 de la mañana todos en perfecta formación, miran al este doblando su tallo en honor de quien le dio la vida, regalando rayos que robaron al sol quizás en un pacto secreto, y de esa forma dejar constancia de la presencia de algo mas poderoso que el humano.
Y en el atardecer todos alineados hacia el oeste, mientras el cielo se pinta de rosas, azules y plateados, así duermen hasta la salida del sol nuevamente repitiendo el ritual mientras su destino sea ese, es lo que llamamos orden, crees que deberíamos imitar a la naturaleza? Paz Profunda...
Vikinga
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